Todos los entretelones de lo que es noticia en Mar del Plata
Tras la polémica por la forma en que se difundirán los resultados de los comicios del domingo, desde las principales fuerzas políticas se analiza cómo se “leerá” el veredicto popular, al margen de todas las especulaciones que hoy se realizan sobre la futura cotización del dólar. En una reciente entrevista, el presidente Javier Milei definió cuál sería, a su entender, un resultado favorable en las elecciones legislativas nacionales del próximo 26 de octubre. “Uno que me asegure el tercio en la Cámara”, afirmó, al considerar que ese número funcionaría como “una pared de defensa” frente a los intentos de frenar sus políticas. Milei señaló además que, con el apoyo de sus aliados “más afines”, La Libertad Avanza podría acercarse a “los 100 votos en la Cámara de Diputados”, lo que le permitiría “alcanzar el quórum” y avanzar en el tratamiento de sus proyectos. El jefe de Estado sostuvo que alcanzar ese equilibrio en el Congreso sería clave para consolidar “una dinámica parlamentaria” que viabilice las reformas estructurales que impulsa su gobierno.
Un excelente hilo en la red social X publicado por Ana Iparraguirre recuerda que en las últimas tres elecciones legislativas la participación fue del 79 %, 76 % y 71 %. Va en caída. Si el domingo participa un 66 % del padrón, respetaría esta tendencia decreciente. Si es más baja, aún hay una aceleración del ausentismo, resalta. Iparraguirre luego analiza los votos obtenidos por el Partido Justicialista en las últimas elecciones. En 2017 fue del 39 %; en 2021, el 35 %, y en 2023, el 37 %. Entre 35 y 39 %. “Poco incentivo a cambiar. Menos de 35 % significaría un retroceso y posible debate sobre narrativas a futuro”, consideró. En el Congreso, el piso del PJ es de 103 bancas en Diputados y 33 en el Senado. “Debajo de esos números, implicaría pérdida de poder real y más margen para repensar su identidad política”.
Ana Iparraguirre también analiza el “escudo legislativo” que pretende alcanzar La Libertad Avanza. “No sabemos cómo se comporta LLA en legislativas, así que solo nos queda comparar con el 2023: un 30 % o menos es un muy mal resultado, porque sin Juntos por el Cambio (que tenía 24 puntos en 2023) no logró crecer nada. Más allá de eso –acotó–, hay que contar bancas y ver cuán cerca queda del escudo legislativo con o sin aliados”. Otro dato que no podrá soslayarse el domingo será el comparativo con los resultados de la primera elección legislativa de los anteriores presidentes. Luca Romero, politólogo y director de Synopsis Consultores, recordó que Raúl Alfonsín obtuvo el 43,6 % de los votos; Mauricio Macri, 41,8 %; Carlos Menem, 40,9 %; Néstor Kirchner, 38,7 %; Alberto Fernández, 34,6 %; Cristina Fernández de Kirchner, 30,8 % y Fernando De la Rúa, 22,8 %.
Cumpliendo el rito de cada año, el concejal Agustín Neme, próximo intendente de Mar del Plata, se fue con su padre “Cacho” a pescar a Bahía San Blas. A 856 kilómetros de la ciudad intentó desenchufarse por un par de días pescando pejerreyes y pescadillas y tratando de responder solo las llamadas telefónicas importantes. “Empezá a mover que me parece que entrás antes”, lo chicaneó en una de esas llamadas un excompañero de básquet del club Quilmes, a propósito de las versiones que comenzaron a crecer en las últimas horas sobre un probable desembarco –antes del 10 de diciembre, como siempre se especuló– del actual intendente y senador provincial electo, Guillermo Montenegro, en el gabinete del presidente Javier Milei. La anunciada renuncia de Mariano Cúneo Libarona como ministro de Justicia a partir del lunes próximo reavivó las versiones periodísticas que marcan a Montenegro como próximo titular de esa cartera. De hecho, también se lo mencionó para Seguridad (Patricia Bullrich asumirá como senadora) y para Defensa (Luis Petri será legislador por Mendoza). “No es lo mismo asumir la intendencia el 10 de diciembre que a fines de octubre, pero de todos modos ya estamos en el baile y preparados”, reconoció uno de los más estrechos colaboradores del concejal del PRO quien, con 40 años, se convertirá en el intendente más joven del actual período democrático iniciado en 1983.
La excusa fue celebrar los 80 números de la publicación Enlace Universitario pero el encuentro, además, sirvió como “despedida” de las autoridades de la Universidad Nacional de Mar del Plata ante la prensa. En la sede del rectorado, ante colegas de diferentes medios, el secretario de Comunicación y Relaciones Públicas, Alberto Rodríguez, agradeció la colaboración de los medios locales en la difusión de las actividades de esa casa de altos estudios, al tiempo que historió el crecimiento de los medios de la UNMdP, reconociendo además la tarea desarrollada por el exrector Daniel Medina durante su gestión junto a los exsecretarios de Comunicación, Alejandro Ara y Jorge Fortezzini, además de trabajadoras y trabajadores de prensa, comunicadores y equipos que durante años contribuyeron al sostenimiento del proyecto. Rodríguez remarcó que la revista “no es una publicación científica ni un simple boletín informativo, sino un espacio de divulgación que reúne las voces, los proyectos y las distintas miradas de la comunidad universitaria”, y valoró el trabajo conjunto entre las áreas de comunicación, diseño y servicios gráficos. “Hay una tarea colectiva, donde intervienen estudiantes, docentes y personal de planta. Enlace es una muestra de lo que somos como universidad pública: un entramado de esfuerzos y de saberes compartidos”, afirmó.
Por su parte, el rector Alfredo Lazzeretti celebró la edición N°80 de Enlace Universitario y destacó el valor institucional de la comunicación pública. “Nos parecía fundamental agradecerles por ayudarnos a difundir lo que la universidad hace. En estos ocho años nos sentimos acompañados por el periodismo, que mostró interés en nuestra tarea y compromiso en momentos difíciles para la educación pública”, expresó. En su mensaje, Lazzeretti hizo referencia al contexto actual de las universidades nacionales, marcado por la discusión sobre la Ley de Financiamiento Universitario y la necesidad de garantizar los recursos para el sistema de educación superior y de ciencia y tecnología. “Hoy atravesamos una situación de desfinanciamiento y de descrédito. El sistema universitario y el de investigación están en riesgo, y eso nos preocupa profundamente porque cuando se paraliza la ciencia, se afecta también la calidad de la enseñanza y el desarrollo del país”, advirtió. Además, Lazzeretti resaltó el papel del periodismo como actor indispensable para la vida democrática. “Vivimos tiempos difíciles para la democracia y también para el periodismo. Cuando le va mal a la democracia, le va mal al periodismo. Por eso es esencial defender la libertad de expresión, la pluralidad de voces y la diversidad de ideas. El país se enriquece cuando sumamos diferencias con respeto”, enfatizó.
La conmemoración por la edición número 80 de Enlace Universitario también significó un cierre de ciclo para ambos funcionarios, quienes finalizan sus respectivas gestiones en la universidad. Rodríguez, al frente de la Secretaría de Comunicación y Relaciones Públicas, y Lazzeretti, al concluir su segundo mandato como rector, coincidieron en destacar la importancia de la renovación institucional. “El sistema universitario se fortalece cuando hay recambios, cuando ingresan nuevas ideas y nuevos equipos. Las gestiones pasan, pero las instituciones permanecen”, señaló el rector. En esa misma línea, Rodríguez destacó que “la universidad se sostiene en su comunidad: estudiantes, docentes, graduados y trabajadores. Nadie puede apropiarse de lo que es de todos”. Mientras Flavio Diez y Albertina Marquestau dialogaban con Natalia Álvarez y Majo Garufi, otros colegas disfrutaban del catering que se sirvió para esa ocasión.
El mismo rector, en charla informal con Daniel Bertagno, brindaba un detalle que quizás no es demasiado conocido. En tal sentido, se estableció que los servicios de catering y lunch de los eventos que organiza la Universidad son realizados por personal de la Secretaría de Bienestar de la Comunidad, que depende de Alejandro Arcamone, y del Comedor Universitario, bajo la responsabilidad de Alejandro Alberhini. Trabajadores no docentes que se encargan de la elaboración propia, saludable, y con todos los controles, de estos servicios que comenzaron siendo internos pero que desde hace un tiempo se ofrecen también en el ámbito privado con marcado éxito. “Pasame el contacto que el servicio de mi cumpleaños sale de acá”, se entusiasmó reconocido colega radial que no dejaba de elogiar lo que para él ya había sido almuerzo.
El Día de la Madre, que históricamente marca uno de los picos de consumo del año, dejó en Mar del Plata una foto preocupante: las ventas cayeron 10,7 % interanual y el ticket promedio fue de $47.500, según la UCIP. Un dato que dice más que mil sonrisas de vidriera. En los comercios del centro y Güemes se vio movimiento, sí, pero más de paseo que de compra. Los locales chicos repiten la misma frase: “Se vendió menos y más barato”. El 54 % de los comerciantes reconoció que las ventas fueron peores a lo esperado y eso que esta vez las cuotas sin interés volvían a escena como una esperanza efímera. No alcanzó. “Un Día de la Madre que no cumplió las expectativas”, resumió Blas Taladrid, titular de la UCIP, en informal charla con dos comerciantes locales en un café de la zona de Luro y La Rioja en el soleado mediodía del lunes. Lo que en otros años era el “respiro de octubre” hoy fue un nuevo parte de una economía que sigue con respirador: salarios licuados, tarjetas al límite y una sensación general de que todo está caro.
En ese mismo café, pero en mesa de la vereda, ocupada por un funcionario municipal –fumador empedernido– con un par de periodistas interesados en conocer los nombres que se sumarán al próximo gabinete municipal en reemplazo de los radicales (se llevaron poca y nada información salvo que habrá fusión de dos secretarías importantes), se intercambiaron comentarios sobre el último informe de la Fundación Pensar Argentina –un ‘think tank’ vinculado al PRO–, que muestra una radiografía precisa del humor social. La foto de octubre tiene matices: la esperanza se mantiene, pero la paciencia se acorta. Se desprendía del informe que, según las mediciones de Casa Tres, un 41 % de los argentinos dice sentir esperanza –dato que sube al 55 % entre los jóvenes–, mientras que el 54 % declara un estado de ánimo negativo, siete puntos más que a comienzos de año. La ilusión y el malhumor conviven en un mismo cuadro, una combinación típica de los momentos de transición económica. “El voto de los jóvenes es clave para el gobierno”, acotaba el colega televisivo.
El estudio confirma que la inflación perdió el podio como principal preocupación (cae del 21 % en abril de 2024 al 3 % en septiembre de 2025), desplazada por los “problemas de administración pública” (45 %) y la inseguridad institucional. Es decir, el foco ciudadano se corre de los precios a la política. Por primera vez en años, las menciones a temas políticos superan a las económicas: la gente habla menos del dólar y más del poder. En la percepción de gestión, el 46 % aprueba el gobierno de Milei, aunque solo el 12 % cree que “está resolviendo los problemas”. Un 34 % le da crédito y dice que “necesita tiempo” y la mitad –el 50 %– considera que “no tiene capacidad para solucionarlos”. La confianza está partida en tres tercios, como la Argentina. El optimismo sobre el futuro también se fractura: el 39 % cree que la economía estará mejor el año próximo, pero el 47 % teme que empeore. Casi la misma proporción piensa que “lo peor ya pasó” (26 %) o “está pasando” (27 %), aunque el 43 % todavía cree que “lo peor está por venir”.
Ya en la segunda ronda de café se señaló que hay un dato clave de clima social: el 63 % admite haber resignado algún consumo o servicio y el 49 % dice que “no le alcanza el sueldo”. Entre los mayores de 50 años, el número trepa al 58 %. Aun así, el 45 % sostiene que “el país va por el camino correcto”, un voto de confianza más emocional que económico. En resumen: Milei llega a las urnas con aprobación dividida, ánimo desgastado, pero un núcleo de esperanza que todavía lo sostiene. El votante promedio no confía del todo en el Gobierno, pero tampoco en la política que lo rodea. Y esa desconfianza general es, quizás, el dato más constante de la Argentina. El domingo las urnas darán su veredicto.
A veces, los números cuentan más que mil diagnósticos médicos. Un nuevo estudio sobre hábitos y estilos de vida en la Argentina confirmó lo que ya intuimos en la sobremesa: somos un país cansado, sedentario y con la heladera medio vacía de frutas y verduras. Según la investigación del Instituto de Neurociencias y Bienestar Insight 21, dirigida por la Dra. Fátima González Palau, apenas dos de cada diez argentinos hacen la actividad física recomendada por la OMS, uno de cada cuatro come frutas y verduras a diario y más de la mitad duerme menos de siete horas por noche. La fórmula perfecta para un mal humor nacional. La encuesta, realizada en siete grandes ciudades, muestra un patrón claro: las mujeres se cuidan más que los hombres, los jóvenes se cuidan menos que nadie y el nivel educativo marca la diferencia entre el autocuidado y el abandono. El informe, que abarca desde Buenos Aires hasta Comodoro Rivadavia, dibuja un mapa de la salud cotidiana que poco tiene que ver con el acceso al hospital y mucho con el modo de vida.
El 78,8% de los argentinos no llega a los 150 minutos semanales de ejercicio que recomienda la OMS. El 51% duerme poco, y dos tercios reconocen que el sueño no les resulta reparador. Mientras tanto, seis de cada diez pasan más de dos horas al día frente a una pantalla y entre los más jóvenes ese porcentaje trepa al 75 %. El país que ya no corre detrás del colectivo, pero sí del WiFi. Hay un costado de género también: el 84 % de las mujeres realiza chequeos médicos preventivos, contra el 66 % de los hombres. Y ellas también lideran el consumo de frutas y verduras y el descanso adecuado. En otras palabras, las mujeres sostienen no solo la casa, sino también las estadísticas de salud.
Los jóvenes, en cambio, aparecen como el grupo más vulnerable. Solo el 15 % cumple con la actividad física semanal y apenas el 16 % come frutas o verduras todos los días. Más preocupante aún, tres de cada diez no se hacen nunca un control médico. La generación más conectada es también la más desconectada de su propio cuerpo. El estudio concluye con un dato que atraviesa todas las variables: a mayor educación, mejores hábitos. No se trata solo de saber que algo hace bien o mal, sino de tener las condiciones materiales y culturales para poder elegir. En definitiva, la Argentina parece moverse entre la ansiedad, la pantalla y el fast food emocional. Dormimos poco, comemos apurados y casi no caminamos. En un país acostumbrado a sobrevivir a las crisis, el cuerpo empieza a pasar factura. Y no hay dólar blue que tape esa inflación biológica.